La menstruación, los cambios del cuerpo después del embarazo o la celulitis, son una condición normal en las mujeres de las cuales nos quejamos y de las que muchas veces decimos ¿por qué a mí? Esta última conocida también como piel de naranja, afecta en gran medida a mujeres, raramente a los hombres, debido a aspectos hormonales.
El sexo femenino posee algunas hormonas que favorece la retención de líquidos y acumulación de grasa corporal. Las dietas a las que se someten la gran mayoría, también son la causa para que aparezca la celulitis debido al gran descuido de su nutrición.
La morfología de la piel es también otro factor para su aparición. Los tejidos de los hombres son sustancialmente diferentes a los de las mujeres. La constitución masculina no favorece la formación de tejido graso entre sus capas. El porcentaje de aparición de celulitis en las mujeres es del 90% mientras que en ellos es del 10% siendo muy notoria en el abdomen y son los obesos más susceptibles a padecerla.
Lo que ellas y ellos no saben es, la existencia de la ozonoterapia para disminuir en gran medida la grasa que se acumula en brazos, piernas y glúteos en la mayoría de los casos y el fácil acceso que tienen a estos tratamientos.
El ozono es un gas incoloro por excelencia que mejora la microcirculación de los capilares gracias a su acción sobre la hemoglobina y los glóbulos rojos, por su poder antioxidante elimina además los residuos de grasa que consumimos a diario. Este se inyecta en las zonas afectadas a través de una aguja cuyo tamaño lo indica el médico especialista en la terapia y, posteriormente se realizan fuertes masajes para que el gas se esparza. Con varias sesiones y con mucha disciplina, la celulitis reducirá notablemente y se podrán obtener los resultados que muchas veces se buscan con costosos productos que ofertan en medios de comunicación y rigurosas sesiones de gimnasia.
Así que mujeres, ya os sabéis, todo tiene solución, y la celulitis no es la excepción. Junto con los hombres, desempeñamos importantes roles en la sociedad donde predominan nuestros valores y virtudes, la apariencia física llámese celulitis, estrías o várices no condiciona a nadie, estos pequeños problemillas existen para ser eliminados.